El domingo 20 el virrey Cisneros se reunió a los jefes militares y les pidió su apoyo ante una posible rebelión, pero todos se rehusaron a brindárselo.
Castelli y Martín Rodríguez insistieron ante el virrey con el pedido del Cabildo Abierto, los criollos discutían sobre las mejores estrategias para pasar a la acción.